Trabajando donde se desarrolla la vida de la persona, se pueden realizar las adaptaciones necesarias para consolidar una red de apoyos satisfactoria, que se traduzca en un aumento en la calidad de vida.

Partiendo de esta idea, la  Fundación Edes amplió sus servicios desde el compromiso con sus fines, apoyando en esta ocasión en el entorno más próximo a los niños, niñas y jóvenes en situación de discapacidad y otros trastornos del desarrollo. Ahora tras un año de investigación y trabajo en este ámbito, se abre el programa a otras personas interesadas. Se trata de trabajar en el entorno familiar, prestando apoyos flexibles y especializados a las familias y/o personas de referencia. 

Se escuchan las necesidades e inquietudes expresadas por las personas y sus familias y se diseña, en colaboración con estas, un Plan de Intervención Personalizado que se realizará, durante todo el proceso, por una persona especializada.

El objetivo es  asesorar y dotar de herramientas a las familias  para que puedan aprender a manejar las situaciones de la vida diaria y saber dar respuestas más ajustadas. Esto aportará bienestar emocional, social y familiar a la persona que necesita apoyo y a toda su red de convivencia. 

El ámbito de intervención es muy variado: mejorar los sistemas de comunicación, la vivencia del tiempo libre, las habilidades sociales, la autonomía personal, el bienestar emocional, potenciar la capacidad de aprendizaje y adaptativa, etc.