El Servicio de Empleo y Formación sigue caminando hacia la incorporación laboral de las personas con necesidades de apoyo en el medio rural

El empleo es una de esas actividades que generalmente vinculamos con la actividad económica, la actividad que genera única y exclusivamente fuentes de ingresos, conflictos, deberes…

En Fundación Edes sabemos que el empleo es mucho más. Es fuente de ingresos, evidentemente, pero también es el lugar en el que crecen y se tejen relaciones, donde las personas crecemos y nos formamos, asumimos responsabilidades y, en definitiva ganamos en derechos como las demás.

En este último año, esta realidad, la de formar parte de un proyecto de empleo ha sido posible para algunas personas, muchas de ellas jóvenes y que han tenido una oportunidad laboral gracias a la apuesta de Fundación Edes por mantener el proyecto de Empleo con Apoyo (que facilita la incorporación de personas con necesidades de apoyo al mercado ordinario de trabajo) y al trabajo que ya se viene haciendo desde hace diez años en el proyecto de Empleo Protegido Finca El Cabillón.

El camino hacia el empleo sabemos que es complejo en la realidad en la que nos movemos. Los altos índices de desempleo juvenil, los porcentajes de desempleo en el caso de las personas con necesidades de apoyo y las condiciones específicas de la ruralidad, nos ponen ante una realidad, en ocasiones, desalentadora. Es por eso que hemos decidido cambiar la mirada, los ojos de quienes miran y confiar en las personas y sus capacidades, y así en la Fundación Edes solo tenemos que acercar los recursos, facilitar los espacios, y posibilitar las oportunidades.
Este año 2016 que ya termina, se cierra con dos cursos de “Actividades Auxiliares en Agricultura” con varias acciones formativas sobre jardinería, horticultura… y algunas actividades para el cuidado y autocuidado de las personas adultas con necesidades de apoyo.

Para mantener y crecer como servicio y consolidar los apoyos que prestamos hemos buscado apoyos, así contamos en esta anualidad con el apoyo de las Consejerías de Presidencia a través del Instituto de la Juventud y de Servicios y Derechos Sociales, con el Servicio Público de Empleo, con la Fundación Cajastur y seguimos contando con financiación del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad a través de la Confederación de Centros de Desarrollo Rural (COCEDER).

Tal y como se refleja en la portada de este boletín el 2016 ha sido un año de celebración. Aún así, quedan grandes retos en los que ponernos a trabajar: mejorar las redes de apoyos locales y comarcales; ampliar los acuerdos en materia de empleo con apoyo y consolidar los espacios de formación y mejora de la empleabilidad. Para ello tenemos ilusión, entusiasmo, confianza y sobre todo, un equipo de profesionales y familias que lo harán posible.