Desde el Servicio de atención temprana del Área I se está realizando una labor importante de prevención y detección precoz de aquellos niños que presentan un Inicio Tardío del lenguaje.

Existe cierta discrepancia científica en relación a la prevalencia  de los Inicios Tardíos del lenguaje a los dos años, oscilando entre el 9% y el 15%  dependiendo de cada investigador. Los  datos que se conocen de las diferentes investigaciones al respecto son los siguientes:

• La incidencia es mayor en niños que en niñas de un 3:1.
• Un 44% de los niños con Inicio Tardío del lenguaje siguen con dificultades a los 3 años y un 40% continúan con dificultades a los 4 años.
• La mayor recuperación “explosión denominativa” se da entre los 2 y los 3 años de edad.

Los niños que pertenecen a ese 40% que sigue con dificultades a los 4 años son todos diferentes. Nos encontramos con niños que además de tener dificultades a nivel expresivo, no entienden; otros utilizan un números reducido de sonidos para expresarse (4-5 sonidos); otros simplifican las palabras a la parte final o a la inicial; otros tienen dificultades con los verbos y lo hablan todo en infinitivo; otros presentan dificultades en la construcción de frases y omiten todas las palabras con menos carga semántica…Estos niños son los que más riesgo tienen de presentar trastornos persistentes del lenguaje más allá de los 4 años de edad. A partir de esa edad pueden recibir  un diagnóstico de Trastorno Específico del Lenguaje (TEL).

Con la ayuda de  los Servicios de Pediatría del área, se está incidiendo en la detección temprana de estos niños que presentan un Inicio Tardío del lenguaje y que por tanto cumplen el siguiente  criterio: a los dos años no tienen un minino de 50 palabras en su vocabulario y no comienzan a formar las primeras combinaciones de palabras. Estos niños son derivados a la Unidad de Atención Infantil Temprana donde se lleva a cabo una valoración del caso y se decide si  es oportuno un seguimiento de su desarrollo evolutivo con respecto al lenguaje o se inicia intervención logopédica.

No todos los niños que tardan en hablar van a tener un Trastorno Específico del lenguaje, pero todos los trastornos del lenguaje fueron hablantes tardíos. Muchos de estos niños evolucionan favorablemente,  pero existe una baja predictibilidad de cuáles de ellos van a tener dificultades a largo plazo. De ahí la importancia de intervenir de forma temprana y evitar así posteriores dificultades de comportamiento o de relación tanto con iguales como con adultos, así como dificultades de aprendizaje especialmente de la lectoescritura.

Durante el año 2016 en la Unidad de Atención Infantil Temprana del Área I, se atendieron un total de 125 niños/as, de los cuales un 40 %  presentaban dificultades o alteraciones en cuanto al desarrollo del lenguaje como se puede ver en el gráfico. A lo largo del año recibimos 74 nuevas derivaciones, de las cuales 35 fueron por Inicio tardío del lenguaje.  Un alto porcentaje fueron dados de alta por positiva evolución pero hay usuarios que precisan intervención logopédica y es necesario tramitar los apoyos pertinentes de cara a su escolarización, de ahí la existencia de un protocolo de coordinación entre las UAIT y los EOE.