La valdesana Manuela Rodríguez no puede estar más contenta con la escolarización de su hijo Jairo Lorences en el colegio Edes. Es su segundo curso en el centro y los cambios, explica su madre, son más que notables. Esta familia de Biescas (Valdés) conoce la Fundación Edes desde hace años pues, tanto Jairo como su hermano Hugo, acudieron al servicio de Atención Temprana, así que, cuando se les planteó la oportunidad de venir a Tapia, no lo dudaron.

¿Cómo fueron los primeros años de escuela de Jairo?
Estuvo escolarizado en el colegio público San Miguel de Trevías hasta sexto de Primaria. Cuando acabó Primaria se nos dieron cuatro opciones: repetir un curso, pasar al instituto de Luarca con un programa adaptado, internarlo en Pola de Allande o venir a Edes. Yo siempre dije que, si era posible, quería que viniese a Edes. Repetir curso no tiene sentido y tampoco queríamos separarnos de él llevándolo a un internado. Conocía a la gente de Edes, pues Jairo vino a Atención Temprana con dos meses y medio y siempre estuvimos muy a gusto y el trato siempre fue muy agradable. Fue una buena decisión y hoy estamos felices. Jairo cambió mucho.

¿En qué aspectos?
Lo principal es que Jairo quiere venir al colegio. Antes, cualquier excusa era buena para librarse de ir a la escuela y ahora, es al contrario, llora si no puede venir. Jairo viene feliz y además está más tranquilo. Antes me resultaba imposible pararme por la calle a hablar con alguien y ahora es capaz de esperar tranquilo. También vemos avances en cosas concretas como en el manejo del dinero a la hora de la compra. Estamos todos mucho más contentos.

¿Lamentas no haberlo traído antes a Edes?
Pues sí, pero la verdad es que nunca nadie me lo sugirió. Es como si no tuviera otra opción que llevarlo a un colegio ordinario. En ese sentido las familias estamos muy desorientadas porque nadie nos explica las cosas, ni te exponen las opciones que tienes. Desde el día en que nace tu hijo estás totalmente perdida y desorientada. No sabes a quién acudir. Se da por hecho que el cien por cien de los niños nacen sin ningún problema, pero no siempre es así y hay que darles atención a todos. La gente no sabe qué es Edes, ni saben lo que se hace aquí. Se trabaja bien y mucho y tu hijo no es menos que nadie por venir aquí. Yo no me escondo, no tengo por qué avergonzarme de nada.

¿Qué aconsejarías a otras familias que se encuentren en tu misma situación?
Que no tengan dudas, si necesitan venir que vengan, que pregunten y se informen bien. Que no piensen que esto es un colegio al que solo vienen niños muy afectados. Las familias no conocen lo que es Fundación Edes y deberían hacerlo, no saben lo bueno que puede ser para sus hijos. Dispones de servicios muy importantes como por ejemplo el ocio de verano. Nosotros trabajamos en el campo y en verano es época de cosecha y hay mucha labor. Poder traer a Jairo aquí es una suerte porque está bien atendido y tú puedes trabajar.

¿Qué esperas del futuro de tu hijo?
Yo quiero que mi hijo el día de mañana pueda tener un trabajo y una vida digna. Quiero que aprenda a defenderse en la vida porque el día de mañana sus padres van a faltar.